EL HATO Y EL GARABATO VS VIÑAS SERRANAS EN EL CLUB WINELOVERS

El último evento de 2024 era muy especial, era diciembre, era Navidad y siempre intentamos hacer algo que se salga de lo normal.

Y este año surgió como de repente y como el turrón, queríamos volver a casa por Navidad.

Entonces pensamos en hacer un evento con las zonas vinícolas principales de Salamanca y Zamora. Y elegimos dos de los mejores proyectos y más representativos de esas zonas:

Viñas Serranas en la DOP Sierra de Salamanca
El Hato y El Garabato en la DO Arribes

Las zonas más cercanas, que mas queremos y más tenemos que potenciar. Porque todavía no se consume lo suficiente. Y nuestros eventos sirven para divulgar nuestra tierra y nuestros vinos más cercanos.

Catamos 6 vinos: cada bodega eligió tres vinos con total libertad como siempre. Y nos apetecía hacer un combate amistoso entre estas dos zonas vinícolas:

De Viñas Serranas vino Miquel Udina

De El Hato y El Garabato vino José Manuel Benéitez.

Los vinos de la cata fueron

– Ecléctico blanco 2022 – El Hato y El Garabato
– Li rosado 2021 – El Hato y El Garabato
– Ciclón 2022 – Viñas Serranas
– Sin Blanca 2018 – El Hato y El Garabato
– El Canchorral 2020 – Viñas Serranas
– El Helechal Solera – Viñas Serranas

Antes de continuar vamos a ubicar cada una de las zonas vinícolas.

Arribes es una de las zona vitivinícolas con más tradición en España y en el mundo, con tipos de uva únicos como Juan García y Bruñal.

Fuente: Consejo Regulador DO Arribes

La Denominación de Origen Arribes unifica dos zonas de larga tradición vitivinícola, localizadas entre Zamora y Salamanca, y vinculadas geográficamente por el recorrido fluvial del río Duero.

La circunscripción de la Denominación de Origen se encuentra en el suroeste de la provincia de Zamora y el noroeste de la provincia de Salamanca, incluyendo un total de cuarenta y siete municipios y una superficie total de 2500 hectáreas, de las cuales actualmente 270 hectáreas están inscritas en el Consejo Regulador.

Su relieve comprende una penillanura estrecha y alargada y un conjunto de pequeños valles originados por la erosión del Duero y sus afluentes Tormes, Uces, Huebra y Águeda.

Fuente: Consejo Regulador DO Arribes

En este enlace de la web del Consejo Regulador aquí puedes consultar más información, bodegas, etc.

En la Sierra de Salamanca el viñedo y el vino ha estado vinculado desde siempre a la naturaleza y al ser humano. Durante siglos se ha cultivado el viñedo en bancales, buscando la integración con el paisaje y seleccionando los mejores suelos y orientaciones para elaborar vinos distintos; vinos ligados a la tierra. Desde 2010, la DOP protege la tipicidad de los vinos que elaboran 10 bodegas convencidas del potencial de la Rufete y de la complejidad del terruño de nuestra zona.

Fuente: DOP Sierra de Salamanca

El verdadero tesoro de la Sierra de Salamanca está en sus viñedos, situados en bancales sobre el río Alagón con cepas muy viejas de variedades autóctonas, como la Rufete.

Durante siglos los viticultores de la Sierra han ido ganando terreno a la montaña para cultivar viñedo en terrazas, conformando el espectacular paisaje de nuestro territorio.

Parte de la zona de producción entra dentro del Parque Natural de Las Batuecas–Sierra de Francia y toda forma parte de la Reserva de la Biosfera Sierras de Béjar – Francia. Este último título, otorgado por la UNESCO en 2006 remarca la gran influencia que ha tenido el ser humano en el medio ambiente de esta zona, modelándolo sin romper el equilibrio de la naturaleza.

En este enlace de la web del Consejo Regulador aquí puedes consultar más información, bodegas, etc.

Y hechas las presentaciones y sabiendo dónde se encuentra cada zona, seguimos con el evento.

EL HATO Y EL GARABATO – José Manuel Benéitez

El primero en intervenir fue José Manuel Benéitez de EL HATO Y EL GARABATO contando su proyecto, su historia y las peculiaridades de su zona: ARRIBES.

Lo primero que nos dijo es que le hacía ilusión estar nuestro evento y nosotros más encantados todavía.

Empezaron en 2015 y en contra de lo que creían Salamanca no es una buena zona para vender Arribes aunque parezca lo contrario.

EL HATO Y EL GARABATO él dice que son del «lejano oeste español», no solo por ubicación geográfico sino por lo que tiene de salvaje. Lo definen su aislamiento histórico y su pobreza.

Es un territorio que no está de paso de ningún sitio y en los años 80 la gente se fue, abandonando no solo los pueblos, sino también las viñas.

Toda la Denominación de Origen tiene 120 kilómetros de norte a sur conservan tan solo 280 hectáreas. Comparativamente con Rioja, Rueda o Ribera del Duero hay bodegas que ellas por sí mismas ya tienen esa extesión.

Arribes es un cañón profundo entre las provincias de Salamanca y Zamora con la división natural del Duero. La zona baja del cañon 400 metros, suelo de pizarra. La zona alta 700 cerca de 800 metros, la zona más pobre, es un gran macizo de granito, no hay suelo, muy pobre. La diferencia de cota tan grande se da tan solo en una distancia de 4 ó 5 kilómetros.

El clima de Arribes es mediterráneo. Hay olivos, hay calor, pero al mismo tiempo llueve el doble que en el resto del Duero español, porque entran las nubes del atlántico que entran desde el mar y descargan. Y en todos sus vinos blancos el hilo conductor es la salinidad, estando especialmente marcada en Ecléctico.

Por ello Arribes permite elaborar vinos muy mediterráneos, sin embargo los vinos de EL HATO Y EL GARABATO tienen una graduación entre 11 y 12º. Hay calor en la copa y frescura en la boca con acideces naturales. Esa PECULIARIDAD expresa lo que es Arribes y es lo que buscan.

La viña de Arribes es una viña muy vieja y muy singular. Ese aislamiento histórico ha supuesto la suerte actual de poder trabajar con variedades locales que solo están en ese rinconcito del país.

Apuestan de forma decidida por la singularidad y personalidad de Arribes. Y es lo que les diferencia.

Además juegan con la rusticidad de la zona: vinos elegantes con un toque rústico.

La viña formaba parte de una economía de subsistencia. Cada familia tenía una viña que no comercializaba. Por ejemplo, su abuelo tenía una hectárea que lo cultivaban para la familia, para beberlo.

Durante siglos la gente solo bebía vino, no bebía agua.

La viña es muy mezclada con variedades blancas y tintas porque buscaban vino fácil de beber. Todas las viñas viejas de Arribes tienen entre un 20 y un 40% de uva blanca. Y luego tienen muchas variedades.

En una parcelita de 1.000 m2 puedes tener 15 variedades diferentes y no de un único clon, sino de una cantidad ingente de clones. Muchas de ellas están en peligro de extinción. Y cada parcela es diferente y tiene su propia personalidad porque a cada paisano le gustaba el vino diferente.

Y les gusta la mezcla varietal. La variedad principal era la que más producía, por ejemplo en Arribes la «Juan García», lo del hedonismo vino después, entonces era necesidad y economía. Y las otras eran variedades que ayudaban a esa variedad principal en algo. Y luego estaba el gusto del viticultor.

Trabajan 10 hectáreas de viña vieja muy dispersa y parcelas muy pequeñas. Esas 10 hectáreas salen de 35 parcelas distribuidas por distintos municipios de Arribes.

EL CARÁCTER DE ARRIBES ESTÁ EN LA MEZCLA y juegan con la acidez.

Y aunque el grueso de la producción es la mezcla varietal, también tienen monovarietales de variedades que se han trabajado muy poco, por ejemplo la variedad blanca «Puesta en Cruz» siempre está en las viñas, pero prácticamente no se hacía porque es muy complicado conseguir una variedad suficiente para elaborar un monovarietal de Puesta en Cruz.

VIÑAS SERRANAS – Miquel Udina

Miquel es catalán pero el amor por la Sierra de Francia le atrapó. Llegó en 2016 y venía a hacer un asesoramiento. Cuando llegó se encontró con una montaña preciosa, viñedos impresionantes. Se enamoró de la zona y de una serrana 🙂 Todo muy alejado del concepto que tenía de Salamanca.

Por aquel entonces nadie bebía vino de la Sierra. Poco a poco entre todas las bodegas las cosas van cambiando. Arribes y Sierra son dos territorios parecidos.

Sierra de Salamanca es una zona con viñedo súper viejo, variedades autóctonas, altitud, viñedos pequeños en medio de bosques de robles y de castaños con variedades autóctonas que dan vinos con mucha personalidad como son la Rufete y la Rufete blanca; el territorio marca mucho los vinos que se elaboran.

Empezó a trabajar con la Denominación de Origen dónde conoció a las personas con las que ahora tiene la bodega: Bossi, Alberto Martín y César Ruiz.

Los viñedos de la Sierra son pequeños, hay que hacerlo todo a mano, por lo que trabajar el viñedo en la Sierra tiene mucho mérito. Amaban el viñedo y lo trabajaban incluso perdiendo dinero. De ahí viñedos y vinos con historia.

Hacen los vinos que les gusta hacer, nadie les impone normas.

Lo que ha creado la Sierra como es ahora es el aislamiento. La locura de replantación no llegó precisamente por ese aislamiento, estaban desconectados, desde los años 50 se empezó a perder viñedo. Y a partir del año 2000 hubo quien empezó a elaborar vinos con rufete y marcaron el camino que ya después han seguido las bodegas actuales.

La variedad rufete no tenía buena fama, porque hace unos 25 años había demasiada homogeneidad en los vinos que se elaboraban. Justo lo contrario de ahora. Esto hace que los proyectos se vuelvan mucho más interesantes.

En Viñas Serranas creen en la finura de la rufete y la potencia de la rufete blanca. Trabajan con la idea de hacer un vino regional, cogiendo uva de distintos pueblos de la Sierra, porque realmente en cada parcela hay muchas diferencias.

Sierra de Salamanca es una de las Denominaciones de Origen más pequeñas de España, unos 500 km2 y a pesar de ser pequeña la diversidad es alucinante. Suelos de granito, pizarra, corneana.

Y después de contarnos las dos bodegas su zona y proyecto, ya pasamos a los vinos catados:

ECLÉCTICO BLANCO 2022 (El Hato y El Garabato)

Variedad: Puesta en Cruz

Trabajan 10 hectáreas de viña vieja muy dispersa y parcelas muy pequeñas. Esas 10 hectáreas salen de 35 parcelas distribuidas por distintos municipios de Arribes.

Es la única uva que trabajan que no es viña vieja. Un viticultor plantó una parcela con 100% de esta variedad. La viña está en la zona alta, unos 700 m. suelo de arenas graníticas.

Fermentación espontánea, depósito inox y se deja con sus lías 8 meses.

Añada 2022 fue una añada muy caliente y la variedad fue capaz de mantener la acidez de forma natural.

Una variedad con un carácter muy fuerte, no se parece a otras variedades. No es frutal, no es de expresión alta, es muy mineral y muy salina. Difícil de ubicar en una zona como es Arribes

Ecléctico es un vino que busca mostrar como es la variedad PUESTA EN CRUZ.

LI ROSADO 2021 (El Hato y El Garabato)

Li es un rosado parcelario. Una única parcela con por lo menos 12 variedades. El 30% son variedades blancas dominando Doña Blanca y en la parte tinta Juan García.

Nombre en honor a su mujer, Liliana.

Zona perillanura, arenas graníticas, 700 y pico metros de altitud.

Se vendimia todo junto, prensado directo y según sale de prensa se mete en barricas usadas. Fermentación alcohólica se deja en barrica un año, es decir un rosado de crianza larga.

Producción muy escasa, lo que salió de la viña: tan solo 2 barricas.

Es el vino con más alcohol de la bodega y también tiene la acidez más alta. Frescura y potencia.

Sin duda un rosado especial, singular y atípico.

CICLÓN TINTO 2022 (Viñas Serranas)

Vino regional, con un punto divertido y muy goloso en nariz que lo da la rufete, mineralidad, frutas del bosque y mucha acidez, tanino crujiente, suele tener 12,5º

Viñedos desde los 600 m. hasta los 800 m., lo que la bodega considera la altitud ideal.

Rufete 100% aunque en las viñas también hay algunas variedades blancas y otras tintas. Viña vieja por abandono, lo que ha venido «bien» en el momento actual ya que el viñedo se está empezando a recuperar.

Separan las parcelas, por pueblos y luego ya van ensamblando, barrica usada de 300 o 500. Fermentación espontánea, intervención justa con el fin de que se note la identidad del territorio.

La vendimia 2022 fue una de las vendimias más difíciles, fue un año muy cálido y muy seco, por lo que se tuvieron que esmerar mucho para conseguir el perfil de frescura que tiene.

Ciclón es un tinto ideal para introducirse en la variedad rufete de la Sierra de Salamanca.

SIN BLANCA 2018 (El Hato y El Garabato)

El primer vino en el mercado. El nombre hace referencia a la escasez económica del momento.

Inicialmente no tenía variedades blancas, cada vez utilizan más variedades blancas en cofermentación.

Cortan todas las uvas de la parcela, elaboración en lagar, pisan, 100% raspón, racimos enteros. Intentan ser lo más delicado posible: la uva se pisa pero solo un poco y lo que se saca de la piel es lo mínimo.

Mojan el sombrero una vez al día con sus manos, no utilizan bombas, ni bazuqueos.

Intentan demostrar en sus elaboraciones que sí que envejecen bien, llevando la contraria a aquellos que siempre han dicho lo contrario.

EL CANCHORRAL 2020 (Viñas Serranas)

Viñas en Monforte de la Sierra plantadas en 1910, una auténtica maravilla. Hay una mezcla de variedades tremenda en una parcela maravillosa: hay rufete, aragonés, calabrés y otras variedades que no están tan presente en la Sierra como la Bastardo o la Cariñena (Nudo Corto en la Sierra) y un 30% de variedades blancas como Rufete Blanca, Malvasía y otras.

Tan solo 700 botellas que es lo que da la parcela, es un vino parcelario.

Es un viñedo discontinuo, como la mayoría de las parcelas de la Sierra. Las viñas están en bancales debido a las pendientes muy empinadas, sobre todo en Monforte.

El Canchorral es el nombre de la parcela, viñedo pequeño de media hectárea que para la Sierra es un tamaño medio, a 900 metros, el límite de la zona. El pueblo Monforte está cerca de La Alberca, mucha lluvia y suelo de granito.

100% raspón en depósito abierto, poca extracción pisado ligero, maceraciones largas y 12 meses en barricas. Homenaje a como se supone hacían los vinos en la Sierra los antepasados.

En cata ciega no da un vino de la Sierra principalmente por las variedades blancas como la Rufete. Un vino al estilo portugués de Arribes, de mezcla de variedades.

Vino fuera de DO porque tiene variedades que no permite la Denominación de Origen, especialmente una mezcla tan alta de variedades blancas.

Es un vino complejo, nada típico ni para todo el mundo, vino muy especial para minorías.

HELECHAL SOLERA BLANCO (Viñas Serranas)

El vino friki de la bodega perfecto para terminar la cata 🙂 La rufete blanca no hace tanto tiempo que se elabora, aunque siempre está presente en la viña.

César consiguió una bota muy vieja de oloroso. Embotellan un tercio de la bota de oloroso (bajo velo de flor) y rellenan año tras año. Pasados 5 años de solera le han llamado El Helechal Solera.

Poquísimas botellas, una rareza.

Elaboración distinta de Rufete blanca, buena acidez. El ciclo vegetativo es muy largo, por ello se vendimia la última. La piel muy gruesa y tiene poco rendimiento en prensa.

La rufete blanca es un poco neutra en nariz. Este vino tiene muchos matices distintos a los vinos de rufete blanca. Boca potente y tánica (por la piel gruesa). Vino largo y complejo que envejece muy bien con el tiempo.

Un gran vino para terminar la cata y desmontando el mito de que los blancos siempre se han de catar antes de los tintos. Dependerá del tipo de blanco y de su complejidad.

Antes de terminar el evento Carmen preguntó el porqué del nombre de cada bodega.

VIÑAS SERRANAS

La iniciaron con la idea de hacer vino en distintas sierras: Francia, Cebreros… y se quedaron en Sierra de Francia porque hay mucho por expresar.

EL HATO Y EL GARABATO

Buscaban nombre para el proyecto y según nos dijo Jose, “la jefa” dio con esta expresión de El Quijote. Sancho quiere apostar todo lo que tenía, pero era muy poco, tan solo “un palo y un hatillo”.

El caso es que en sus inicios ellos se iban a jugar todo, que en ese momento era muy poco, de ahí el nombre de El Hato y El Garabato.

Ambos nombres muy acertados y que expresan la filosofía de cada proyecto.

Como siempre el broche de oro fue nuestro habitual sorteo entre risas y alegrías de las afortunadas.

Las tres tapas especiales elaboradas para este evento por nuestro equipo de cocina han sido:

– Árbol de Navidad
– Nido, pesto y langostino
– Empanadilla de manzana y hierbabuena.

#MOMENTOSWINELOVERS del evento con EL HATO Y EL GARABATO VS VIÑAS SERRANAS

Botellas disfrutadas durante el evento

Y además ambas bodegas sienten un hermanamiento, tienen una filosofía en común, incluso comparte distribuidores internacionales, lo que hizo que el evento fuera aún más especial.

El evento terminó con un amplio debate acerca del vino, de lo humano y lo divino. Somos amantes del vino, de su filosofía y además nos encanta compartir nuestra visión siempre con una copa en la mano. Este momento tan agradable no te lo voy a contar, porque para respirar, beber y vivir nuestros eventos… tendrás que venir.

«Tenemos que querer lo que tenemos cerca. Hay un valor y una diferencia, no se parecen a nada» Luis Miguel Fernández

Nos esforzamos por dar a conocer no solo vinos, sobre todo el lado humano de cada proyecto y las personas que lo hacen posible, porque sin personas no hay vino, ni eventos, ni momentos así.

Nos vemos por Winelovers. 🥂

LUIS MIGUEL FERNÁNDEZ
Winelovers, vinos, tapas y
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Las fotografías y el vídeo son de David Lorenzo y su compañera Violeta, del equipo de Ángel Lorenzo y Memento Mori Audiovisuales

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